Las ayudas claves de la fisioterapia en el Alzheimer
El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa incurable que trae consigo una serie de consecuencias adversas para lo que es la calidad de vida del enfermo, que tiene que hacerle frente no sólo a la pérdida de memoria sino también cambios en el estado de ánimo, dificultades para mantener el equilibrio y la coordinación, disminución de su capacidad verbal y lingüística…
No obstante, pese a todo eso, hay que ser conscientes de que desde el momento que se le diagnostica esa patología puede actuar no sólo para frenar el avance de la misma sino también para que, en cada fase (primera, segunda y final), pueda vivir de la mejor manera posible. ¿Cómo? Poniéndose en manos de fisioterapeutas. Y es que la disciplina sanitaria que estos llevan a cabo es una herramienta de gran utilidad en ese sentido. Sí, como lo estás leyendo. Es un recurso esencial para alcanzar el mencionado objetivo, ya que le ofrece, mediante todo tipo de ejercicios y actividades, ayudas de este tipo:
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Le ayuda a minimizar los riesgos de poder sufrir una caída. ¿Por qué? Porque mediante el trabajo de esos profesionales médicos mejora de manera notable tanto su equilibrio como la coordinación de sus movimientos.
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De igual modo hay que subrayar que es útil para aumentar su memoria y también para mejorar lo que es su comportamiento. Un aspecto este último importante si tenemos en cuenta que muchos enfermos de Alzheimer se vuelven agresivos.
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También la fisioterapia ayuda al paciente a que pueda descansar mejor.
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Ni que decir tiene que le sirve para poder contar un mejor estado de ánimo, lo que supondrá que pueda reducir sus riesgos de padecer depresión.
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Otra de las grandes ventajas que tiene el recurrir a esta disciplina y a sus profesionales en los casos de la mencionada enfermedad neurodegenerativa es que se logra mantener en el mejor estado posible lo que son todas y cada una de las habilidades motoras.
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Dentro de este conjunto de beneficios que trae consigo la fisioterapia no hay que olvidarse de que consigue que la persona con Alzheimer mejore lo que son sus habilidades sociales e incluso que pueda ver reducidos los riesgos de sufrir problemas tales como el estreñimiento.
Por todo ello, está claro que se debe confiar ante esa enfermedad en los fisioterapeutas ya que ayudarán a mantener la mayor calidad de vida posible.