El tratamiento fisioterapéutico en la segunda fase del Alzheimer
Como te hemos dado a conocer en anteriores artículos, la fisioterapia se convierte en una herramienta fundamental para las personas enfermas de Alzheimer. Lo es en todas sus fases de evolución, ya que en cada una de ellas le otorgará a los pacientes una serie de recursos que les ayudará a minimizar los síntomas y a mantener, en la medida de lo posible, la mayor calidad de vida.
En este caso, después de exponerte las claves del tratamiento fisioterapéutico en la primera etapa de la patología, queremos que conozcas cuáles son los pilares del mismo cuando el individuo se encuentra ya en la segunda, también llamada intermedia. Un momento este en el que ya tiene notables, aunque periódicas, lagunas de memoria, en el que requiere contar con ayuda para realizar tareas del día a día como vestirse o peinarse, en el que sufre un cansancio permanente y en el que su vocabulario se reduce bastante.
En concreto, de esta manera ayudan los fisioterapeutas a los enfermos de Alzheimer que entran en el segundo periodo de la misma:
-
Como hemos mencionado, comienzan a necesitar asistencia para realizar acciones del día a día que antes hacían por sí solos. Y eso es debido a que sus gestos y su movilidad empiezan a reducirse. Por ese motivo, los profesionales de la mencionada disciplina sanitaria, como los que integran la plantilla de Fisiohogar, proceden a realizar ejercicios para mejorar el estado de las articulaciones.
-
De cara a evitar que adopten posturas que les resulten inapropiadas y que puedan traer consigo consecuencias adversas, también se trabajará al respecto mediante ejercicios que ayudarán a potenciar los músculos, corregir la columna o flexibilizar el tórax.
-
Por muy diversos motivos, los aquejados de Alzheimer que estén en la segunda fase de la misma pueden sufrir ciertos dolores. De ahí que la fisioterapia determine pautas y actividades para aliviar esos.
-
Por supuesto no hay que pasar por alto que en esta etapa de la patología es vital acometer ejercicios que les serán de gran utilidad a las enfermos en cuanto a mantener un buen equilibrio y una coordinación idónea.
Estas son las principales áreas de trabajo de los fisioterapeutas en la situación planteada. Pero, de la misma manera, también trabajarán con sus pacientes aspectos que les servirán para evitar complicaciones respiratorias o dificultades notables para caminar.