El papel de la familia en la rehabilitación con fisioterapia neurológica
En la rehabilitación de una persona con una enfermedad neurológica, el apoyo de la familia es esencial. Las enfermedades y dolencias relacionadas con el cerebro son muchas y afectan a personas de todas las edades. Muchas de ellas se manifiestan al momento de nacer y otras pueden aparecer más tarde; pero en cualquier caso, el efecto en el paciente es muy fuerte y precisa, más que nunca, el apoyo y colaboración de su entorno más cercano.
La colaboración y ayuda de la familia es esencial en la rehabilitación neurológica.
La participación de los familiares debe comenzar desde el primer momento que se manifiesta una enfermedad neurológica. La etapa de identificación de la dolencia concreta y la búsqueda del tratamiento más adecuado a cada caso no es siempre una tarea fácil y rápida. El entorno más próximo al paciente debe comenzar por ayudarle a asimilar lo que ha sucedido, a afrontarlo y a comprender que la negación sólo favorecerá el avance de la enfermedad.
Con el apoyo específico de familiares, amigos y, por supuesto, expertos en fisioterapia neurológica se puede lograr avances notables.
Dependiendo de los casos y de la edad del paciente este apoyo puede variar desde el traslado a la clínica para realizar el tratamiento, la ayuda para el acondicionamiento del hogar a las nuevas circunstancias u otras acciones específicas para la realización de ejercicios de rehabilitación.
Los familiares pueden ayudarnos a realizar los ejercicios fisioterapéuticos.
Lo importante es que desde el inicio la persona con una enfermedad neurológica sepa que no está sóla para afrontar esta nueva situación. Recomendamos que una o si es posible más personas cercanas al paciente acudan con él los médicos y fisioterapeutas para que les expliquen de qué manera pueden ayudar y qué se espera de ellos.
Aunque los pacientes cuenten un programa de rehabilitación y la atención de expertos en fisioterapia que varíen este tratamiento de acuerdo a su evolución y condiciones generales, la práctica reiterada y constante de ejercicios, movimientos y masajes son siempre de gran ayuda y alivio. Además, por supuesto, del efecto animador y positivo que supone trabajar con alguien con el que nos unen fuertes lazos familiares y de amistad.
